domingo, 24 de mayo de 2009

PAREDES

A veces me gustaría vivir en la típica casa americana en vez de en el chalet de mis abuelos.

Cambiaría las paredes de gotelé y los tabiques de ladrillo por los revestimientos de vinilo barato, las estructuras de madera y las particiones de cartón-yeso.

Buscaría los papeles pintados en las paredes y las láminas costumbristas de colores sombríos enmarcadas con listones dorados.

En ocasiones añoro tanto esa casa inexistente que ni yo misma lo entiendo.

Añoro ver aparecer las capas que la forman al paso de mis puños furiosos, una tras otra,
siempre ajenas a mis decepciones y desencantos;
siempre tan fácilmente descubiertas por mi ira.